El 24 nos fuimos a la finca de mi tío a pasar allá navidad y tener la cena en familia, al llegar allá, me di cuenta que nadie de los que estaba allí realmente quería estar allá, todos de una u otra manera estaban cumpliendo con una labor social o una obligación de algún tipo, la cosa fue de miradas incomodas, a silencios incómodos y al final de todo hasta en palabras se decía por debajo de la mesa que no se quería estar allí, pero bueno todo era por la familia, al final la hipocresía social le gano a las ganas de quedarse en la casa.
foto: Diana Urrutia
Pero llego lo peor, tal vez recuerden a kero y de cuando toco entregarlo, pues resulta que es la misma finca, por tanto allí estaba Kero, mi perro una sensación de sofocamiento subía por mi garganta, la cosa se estaba poniendo cada vez más fea; decidimos con mi primo bajar a verle, para saber como se encontraba, y fue lo peor que pudo haber pasado, mi perro que me lo sacaron de la casa porque se la pasaba encerrado y molestaba aullando a mis abuelos, que era grande y podía causarle daños a los viejos, un perro joven alegre y tranquilo que le gustaba jugar y corretear por la casa, ese era su pecado original, fue condenado al exilio y su exilio era un remedio, una finca, grande dónde correr, ser libre y jugar... pero al contrario de esto el perro se la pasa amarrado a un palo.
foto: Sergio Urrutia
Casi lloro al verlo batir la cola y lanzarse encima mio al verme, casi hasta ahogarse con la correa que lo mantiene unido a un palo al lado de lo que parece ser su lugar para dormir, esta imagen me destrozo, al preguntar por que de este trato hacia él, me contestan que se ha escapado varias veces, y en una de sus aventuras termino matando a un ternero, cosa que me agrado al menos no es tan guevon, porque igual se ha engordado, yo entregue un perro activo y como con formita ahora esta como gordito, pero quien no si lo atan a un palo y le dan de comer y no puede hacer más nada.
foto: Diana Urrutia
foto: Diana Urrutia
foto: Diana Urrutia
Aquí la foto que más me ha indignando de todo el año en curso, el idiota que lo sostiene es mi abuelo, es el mismo idiota que hizo que echaran a mi perro de la casa, y acá por hacerse el buena gente salio a darle un paseo al perro, lo que termino en una sesión de fotos del don con el perro y volverlo a amarrarlo, no hay derecho para que este imbécil se pasee con él
foto: Diana Urrutia
Sólo quiero ir a traerlo de vuelta, pero para eso necesito que el man de la foto fallesca :P, yo sé no debería estar deseando la muerte de mi abuelo, pero a la larga ya esta como viejo el don y solo molesta.