Esta madrugada, dicese de las 6am, tuve una pesadilla, no podía salir de mis cobijas por temor, acurrucado en posición fetal pensando en lo horrible que había sido, no quería volver a dormirme por aquello de que regresara el tormentoso sueño, entonces hice lo que se debía, salí a pedir la ayuda de mi madre, tal vez un abrazo o un chocolate caliente para reconfortarme y volver a dormir, pero oh sorpresa cuando encuentro a mi hermano en la cama de mi madre, cara de puchero, diablos no tengo dónde acomodarme y no quiero volver a mi cuarto... mi madre entre abre un ojo y me hace campo en su ya reducida cama, me abraza y me pregunta qué paso, le digo que una pesadilla y me intento arruchar lo mejor posible en ese espacio, aunque claro no nos fue sencillo para los tres acomodarnos, al final, mi hermano se fue porque ya no tenia espacio, y mi madre no estaba pudiendo dormir entonces se movía constantemente, yo por mi lado decidí pararme he irme... al mirar atrás una sonrisa en su cara, y las palabras ya te vas, fueron tan contradictorias que me dejaron pensando, aun no entiendo a que vino eso.
Acerca de la pesadilla sólo hay algo que me perturba, que la cara del fantasma, o de la cosa que nos asustaba, era la cara de una muy buena amiga mía sumado eso a que fuera la hija de Richard Nixon.
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